“Esperamos un terremoto diez veces más potente que el de Lorca en 2011”. Ante la latente amenaza que supone esta evidencia, recordada por el profesor de la Escuela de Arquitectura y Edificación Carlos Parra, la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) ya está trabajando con metodología novedosa en España “para anticipar los daños y poder tomar medidas que nos eviten un gasto mayor en reparaciones tras el seísmo”, argumenta Parra.
El investigador ha dirigido el Proyecto Final de Carrera en Edificación de Belén García Martínez, que estudia la vulnerabilidad de los edificios de la Región durante los seísmos esperables en esta zona sísmica. Calificado con matrícula de honor, el trabajo de la alumna “ha ido más allá de estudiar la aplicación de la norma española, que no contempla la posibilidad de que se desprendan elementos constructivos como cornisas que pueden resultar fatales”, explica el docente de la Politécnica.
La investigación ha recurrido a los códigos norteamericanos de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA 440) y del Consejo de Tecnología Aplicada de California (ATC 40) para analizar el desplazamiento máximo que soportan los edificios y qué ocurre con las construcciones reales durante diferentes sismos.
“Hemos aplicado la metodología a casos reales, estudiando edificios convencionales de planta baja más tres alturas, midiendo los daños que se producirían y si los edificios serían habitables después del terremoto”, prosigue Parra. El peor de los supuestos contemplados en la investigación en un seísmo de magnitud 6,4 grados en la escala Richter.
“Es el primero de los trabajos en esta línea de investigación, en la que manejamos programas avanzados de elementos finitos para la determinación del daño real en construccions, usamos códigos avanzados y utilizamos los laboratorios para comprobar los resultados”, sintetiza el investigador, que ha formado parte de la Unidad de Investigación Sísmica de la UPCT que ha realizado una pionera microzonificación sísmica en Lorca.
Dos estudiantes del Máster en Ciencia y Tecnología de la Edificación en Arquitectura se encuentran actualmente ampliando esta línea de investigación. Uno de ellos estudia en colaboración con el Centro Tecnológico de la Construcción cómo mejorar el hormigón. Mientras que otro se encuentra desarrollando un manual de transferencia tecnológica para divulgar estos conocimientos de cara a futuras edificaciones.