Música y a la calle. Con estas palabras la alcaldesa de Cartagena, Pilar Barreiro, daba comienzo a la Semana Santa de este año en la tradicional Llamada que se realiza cada Miércoles de Ceniza. Centenares de cartageneros no se han querido perder la cita de esta noche y se congregaban expectantes en la Plaza del Ayuntamiento para ver de cerca el acto que se realiza desde el balcón del Palacio Consistorial y que marca el inicio de la Cuaresma con la cuenta atrás de la Semana Santa.
Como ya es habitual, la primera edil hacía entrega del cheque a los hermanos mayores de las cofradías, una cantidad similar a la del año pasado: 183.000 euros. Así, una vez más, el Ayuntamiento mantiene sin recortes su ayuda económica a las procesiones, a pesar de la crisis.
Toda la familia procesionista estuvo presente en la Llamada, aunque fue el vicepresidente de la Junta de Cofradías, Juan Carlos de la Cerra, quien pronunciaba un discurso minutos antes de la entrega del cheque. Lo hacía en nombre del resto de hermanos mayores, Domingo Bastida, Tomás Martínez y Manuel Martínez.
En su intervención, destacaba el compromiso y la ilusión que despierta entre los miles de cartageneros esta semana grande, que se ha convertido en una de las manifestaciones sociales, culturales y populares más arraigadas de la ciudad. También agradecía el apoyo inestimable del Ayuntamiento que con su ayuda hacen que las procesiones conserven cada año el esplendor y la belleza tradicionales.
Por su parte, la alcaldesa también hacía mención en su discurso al esfuerzo y el empeño que depositan todos los cartageneros en esta Semana Santa, que meses antes de que salga a la calle, se vuelcan con un calendario frenético de actividades con encuentros, presentaciones y ensayos.
Tras este acto, la alcaldesa y la mayor parte de la corporación municipal, se dirigían con los cofrades a la Basílica de la Caridad para realizar la tradicional ofrenda de la patrona. La Nazarena Mayor, María José García Roche, también participaba en este evento de gran simbolismo para la ciudad.
Un par de horas antes se reunían los cabildos generales de las cuatro cofradías en sus respectivas sedes para tomar la decisión de sacar a la calle las procesiones de este año. Puntuales, a las 20,30 horas, y a ritmo de las marchas procesionistas, llegaban los hermanos mayores de los Californios, Marrajos, los del Cristo del Socorro y Resucitado para comunicarle a la alcaldesa que este año se volverá a celebrar la Semana Santa en Cartagena.