He superado con creces mis expectativas. Con estas palabras y con una enorme sonrisa en su rostro resumía Ana Belén su periplo voluntario de dos meses en Bélgica, país del que acaba de regresar y en el que ha estado colaborando en un centro de rescate de animales especializado en aves.
Ella es una de las dos cartageneras, junto a Marina, que esta mañana ha sido recibida en el Palacio Consistorial por la concejala de Juventud, Ruth Collado, tras su paso por el Servicio Voluntario Europeo (SVE), gestionado por el Espacio Joven y dirigido a personas de entre 18 y 30 años.
Aprender ayudando o ayudar aprendiendo, no importa la combinación teniendo en cuenta la regla matemática de que el orden de los factores no altera el producto, es la clave del éxito de este programa que se presenta como una excelente oportunidad para que los jóvenes cartageneros crucen las fronteras nacionales y se adentren en otras culturas y costumbres, entablen nuevas relaciones sociales, al tiempo que amplían y llevan a la práctica sus conocimientos, colaborando con una buena causa.
Estas inquietudes personales y profesionales son compartidas por los 12 cartageneros que en la actualidad se están beneficiando de esta experiencia formativa en países como Bélgica, Alemania, Suecia, Italia o Hungría. Un salto altruista dado por estos jóvenes de la ciudad, en un momento difícil por la coyuntura económica y laboral que vive el país, que conlleva también una gran responsabilidad, como manifiesta Ana Belén, pero que se ve gratamente recompensado porque te sientes útil.
Sentimiento análogo aflora en Marina, la segunda de las cartageneras que acaba de aterrizar en la ciudad portuaria procedente de Bulgaria. El trabajo en colegios de este país europeo con niños discapacitados la ha llenado de satisfacción, razón suficiente para no dejar de recomendar esta iniciativa formativa y solidaria a todos los cartageneros.
Estos jóvenes son a su vez un ejemplo de que la barrera idiomática es salvable como demuestran sus historias, puesto que en muchas ocasiones la comunicación se presenta como el principal obstáculo por el que muchos rehúsan de esta experiencia tan enriquecedora.
A colación de esto último, la concejala de Juventud ha animado a los jóvenes a pasar por el Espacio Joven donde se les facilitará información y asesoramiento sobre cómo poder participar en el Servicio Voluntario Europeo.
SEIS NUEVOS VOLUNTARIOS EUROPEOS ELIGEN CARTAGENA
Cartagena no es sólo una ciudad emisora de jóvenes dispuestos a vivir una experiencia en otro país comunitario, sino también es un enclave receptor de voluntarios europeos que eligen a la ciudad portuaria como epicentro de su estancia, la cual durará 9 meses.
Así, junto a la llegada de las dos cartageneras, la concejala de Juventud también ha dado la bienvenida oficial a los 6 nuevos voluntarios, que quieren integrarse en las costumbres de la ciudad, y que colaborarán tanto en los departamentos de la Concejalía de Juventud como en el Proyecto Life+ dedicado a la investigación del Garbancillo de Tallante.
Llegaron a principios de esta semana y son Adél de Hungría que se dedicará a la Bolsa de Idiomas y el Infoviaje; de Letonia llega Zane que colaborará con la Botica del Libro y Nicola, italiano, estará más integrado en el programa IMPLICA2. Por su parte, el germano Matthias compartirá tanto el programa T-LA como el Garbancillo de Tallante, mientras que la italiana Antonia y el irlandés Jonathan colaborarán en el Proyecto Life+.
Precisamente éste último ha sido el encargado de romper el hielo por ser el que contaba con un mayor nivel de español, como ha comentado María Ãngeles Ortiz, técnico del Espacio Joven encargado del SVE. Nos ha gustado la ciudad y la gente es muy amable, al tiempo que se ha referido a su trabajo en la ciudad, apuntando que el Garbancillo de Tallante es una especie en peligro de extinción.
EL SERVICIO DEL VOLUNTARIADO EUROPEO
El Servicio Voluntario Europeo (SVE) forma parte de un programa comunitario de educación no formal, en el que los participantes realizan las actividades in situ. El Espacio Joven de la Concejalía de Juventud de Cartagena como entidad de envío y de acogida, se encarga de informar, ayudar y tramitar todo lo necesario para que cualquier joven, no sólo de Cartagena sino de toda la Región de Murcia, pueda participar en dicho programa.
En el SVE puede participar cualquier joven con edad comprendida entre los 18 y 30 años, siempre y cuando residan en un país miembro de la Unión Europea. Los jóvenes con menos oportunidades, incluidos los jóvenes con discapacidad, también pueden participar activamente en este programa.
Asimismo, el programa se hace cargo de todos los gastos de desplazamiento, alojamiento y manutención y se encarga de ofrecer formación intercultural y lingüística.
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