Prometen rumba, rock, sinvergüenzonería, experiencia, locura y mucho humor. Se trata de La Pandilla Voladora, un supergrupo integrado Muchachito, Albert Pla, Lichis, Tomasito y El Canijo, artistas con años de carrera a sus espaldas y de sobra conocidos en la escena del mestizaje o del flamenco fusión.
Muchachito Bombo Infierno (guitarras y voz), Albert Pla (guitarras y voz), El Lichis (exlíder de La Cabra Mecánica, bajo y voz), Tomasito (tabla flamenca y voz) y El Canijo de Jérez (exmiembro de Los Delinqüentes, guitarra española y voz), acompañados por los músicos Diego Cortés (guitarra española y coros), David Saénz de Buruaga (guitarra española, sintetizadores y coros) y Tino di Geraldo (batería y coros) han formado un proyecto fiestero que el 20 de julio estará en La Mar de Músicas. Las entradas saldrán a la venta el 26 de abril.
El proyecto, que nació por sincera amistad y puro compañerismo, adoptó cierta forma durante unos días de ensayos en una masía gerundense, y por ahora se basa en un repertorio de "grandes éxitos y fracasos" de todos los participantes, como La lista de la compra o Felicidad de La Cabra Mecánica (es decir, de Lichis) o Primavera Trompetera de Los Delinqüentes (esto es, de El Canijo).
La Pandilla Voladora se presentó ayer en Madrid con el lema Del deporte también se sale, aunque la gira será en el mes de julio. Todo empezó cuando Tomasito, bailaor al que algunos aseguran que han visto taconear hasta dormido, fue a la playa de Tarifa uno de esos días en los que no la azota el viento. ¿Estaban los del surf con vela cabreaos, porque no podían hacer deporte. Toda la pandilla voladora enfadadísima. Tenían mono. Y yo pensaba, 'tranquilos, del deporte también se sale¿. Meses después "del deporte también se sale¿ es el lema de Pandilla Voladora, un nuevo supergrupo.
La idea ha nacido de las cenizas del G5, otro supergrupo en el que estaban Muchachito, Canijo y Tomasito y que completaban Kiko Veneno y Ratón, la otra mitad de los ahora desaparecidos Delinqüentes. Unidos por la rumba, un género que "es infinito", la creatividad de estos músicos fluye casi sin querer.