Ni hao y Zà i jià n (hola y adiós) son las dos primeras palabras que Jairo García ha enseñado a sus alumnos. Desde hace una semana, una de las aulas del Centro de Recursos Juveniles se ha convertido en una improvisada clase de idiomas, en concreto, de chino mandarín.
El curso forma parte del programa T-LA (Tiempo Libre Alternativo) de invierno de la Concejalía de Juventud. A las clases que imparte los lunes por la tarde Jairo García se han inscrito 12 personas con un objetivo común, aprender a expresarse en esta lengua y, quién sabe, quizá poder suplir en un futuro la falta de traductores y de profesores de chino mandarín en España.
El curso dura 18 meses aunque se ha estructurado en trimestres. Por ahora, los estudiantes aprenden el sistema Pinyin, es decir, la transcripción fonética de los caracteres chinos al alfabeto occidental. Es una manera, según el docente, de facilitarles el aprendizaje.
Las lecciones van enfocadas al aprendizaje de la expresión oral en chino mandarín. No nos vamos a centrar mucho en la escritura, que es más compleja, ya que, para Jairo García lo más importante por ahora es que los estudiantes puedan comunicarse sin problema en chino.
Las edades del alumnado varía de los 25 a los 40 años y han empezado a aprender el mandarín, en su mayoría, porque según el profesor, aparte del inglés es uno de los idiomas más demandados en la actualidad. Hay mucha escasez de profesores chinos, de traductores en comisarías, en hospitales... y en el mundo laboral cada vez son más empresas las que importan y exportan con China.
Una de las razones que impulsó a la Concejalía de Juventud a ofertar un curso de chino mandarín fue la avalancha de peticiones, más de 400, que ha recibido este año la Escuela Oficial de Idiomas de Murcia para cursar este idioma.