El delegado de Gobierno en Murcia, Rafael González Tovar, y el presidente autonómico de Cruz Roja en la Región de Murcia, Aurelio Luna Maldonado, acompañados por Emilio José Nieto Manso, almirante de Acción Marítima (ALMART), Manuel Rosety Fernández de Castro, almirante del Arsenal Militar de Cartagena, y Carmen Martín Muñoz, directora Nacional de Salud y Socorros de Cruz Roja, han procedido esta mañana a la botadura de una nueva embarcación de Cruz Roja, que va a tener su sede en Cartagena.
Esta embarcación, denominada LS-Atenea, ha sido adquirida con fondos del Ministerio de Trabajo e Inmigración, en virtud de un convenio suscrito con Cruz Roja Española para realizar la atención humanitaria a los inmigrantes llegados en patera a las costas de la Región.
González Tovar ha destacado que “esta faceta humanitaria es la primordial en todo el operativo constituido en el litoral de cara a la llegada de inmigrantes, en el que los esfuerzos iniciales van dirigidos a evitarles situaciones de riesgo y, cuando éstas se dan, a salvar vidas y a atenderles de la forma más rápida y eficaz posible”.
El delegado del Gobierno ha recordado que en estas labores de detección, búsqueda y rescate participan diversos organismos, como Cuerpos y Fuerzas de Seguridad, Salvamento Marítimo y Cruz Roja, y ha destacado “la ampliación durante el pasado año del Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE), con la entrada en funcionamiento de las estaciones fijas, que han venido a unirse a las dos móviles que ya operaban en el litoral regional”.
Ha señalado que “este operativo no puede evitar la llegada de pateras pero lo que si podemos hacer con la colaboración de todos es detectar su presencia, socorrer a sus ocupantes e impedir la entrada clandestina de personas en territorio nacional”, labores que se complementan con la devolución de los inmigrantes irregulares a su país de origen.
Por su parte, Aurelio Luna Maldonado ha dicho sobre la nueva embarcación que “su misión consistirá en participar plenamente en aquellas labores preventivas o de búsqueda, salvamento y rescate motivadas por la llegada de personas inmigrantes a nuestras costas”
En este sentido, gracias al convenio suscrito con el Ministerio de Trabajo e Inmigración, los voluntarios y trabajadores del ERIE AHÍ (Equipo de Respuesta Inmediata de Atención Humanitaria a Inmigrantes) de Cruz Roja han realizado 56 intervenciones con pateras, atendiendo a 705 personas inmigrantes, de los que 542 han sido atendidos en la propia Cartagena, durante el 2009.
Sin embargo, tal y como señaló el propio Aurelio Luna, “esta embarcación también participará en cualquier situación en que se vea comprometida la seguridad de la vida humana en la mar y realizará actividades destinadas a preservar el medio ambiente”.
Siguiendo con esta tónica, el presidente autonómico de Cruz Roja señaló que “Cruz Roja dispone de otras 5 embarcaciones como ésta, con las que los voluntarios y trabajadores de Cruz Roja, mediante convenios firmados con la CARM y con SASEMAR, han realizado 187 intervenciones en el año 2009, de salvamento de vidas humanas en el mar, búsqueda y rescate de personas desaparecidas, lucha contra la contaminación y remolque de embarcaciones en peligro”.
La actividad de esta embarcación, tal y como determinó Aurelio Luna, “se realizará de forma coordinada con la Autoridad Marítima, a través de la Sociedad de Salvamento y Seguridad Marina y el resto de actores y administraciones implicados en la salvaguarda de la vida humana en el mar”. Así mismo, el presidente autonómico de Cruz Roja quiso “felicitar a la Administración General del Estado y al Gobierno de la Región de Murcia por los esfuerzos realizados en materia de seguridad marítima, protección civil y preservación medioambiental”.
En el desarrollo de su intervención, el delegado del Gobierno ha recordado con emoción la reciente muerte de tres miembros del Salvamento Marítimo al caer al mar, el pasado 21 de enero el helicóptero en el que realizaban unas maniobras en las proximidades de Almería. A ellos y sus familias ha agradecido su profesionalidad, entrega y generosidad en las labores de rescate que venían realizando.