Valcárcel inaugura en Cartagena la nueva Casa Hogar Betania y la rehabilitación de la sede de la Cofradía Marraja

Las nuevas instalaciones de la Casa Hogar Betania cuentan con tres pisos en planta baja, que acogen a nueve ancianos atendidos por cinco cuidadoras en régimen de veinticuatro horas

El presidente de la Comunidad Autónoma, Ramón Luis Valcárcel, inauguró hoy en Cartagena la nueva Casa Hogar Betania, que gestiona la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno (Marrajos) a través de su fundación. Posteriormente, el jefe del Ejecutivo regional también presidió la reapertura de la sede de la cofradía Marraja tras su rehabilitación.

La Casa Hogar Betania parte de una iniciativa emprendida desde la Fundación creada en 1996 por la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno para ejercer su obra social. Finalmente, fue en 1999 cuando la Casa Hogar abrió sus puertas para prestar atención y acogida, a cargo de voluntarios de la cofradía y de personal contratado, a ancianos desasistidos familiarmente.

En 2000, se transformó en un hogar de acogida las veinticuatro horas, en el que residían ocho ancianas, manteniendo a dos ancianos en régimen de día. Inicialmente se sustentó en un piso cedido y luego en otros de alquiler, hasta que, en 2007, la Sociedad municipal Casco Antiguo de Cartagena inició los trámites para la cesión de unos pisos que serían reformados en 2008 para adaptarse a las condiciones que la Comunidad Autónoma establece para los centros residenciales de mayores.

Las instalaciones que hoy se inauguran están integradas por tres pisos de planta baja, uno para servicios comunes (comedor, salón, cocina, despensa y aseo) y los otros dos, unidos, con dos habitaciones dobles, cinco individuales, un despacho para cuidadoras, dos baños, dos aseos, y zonas de servicio. Actualmente residen en la misma ocho ancianas y un anciano, atendidos por cinco cuidadoras en régimen de veinticuatro horas.

Es de destacar la colaboración de voluntariado de los componentes de la Cofradía, especialmente las juntas de damas de las agrupaciones y los jóvenes marrajos. La Comunidad Autónoma, a través de la Consejería de Política Social, Mujer e Inmigración ha colaborado aportando la cantidad de 47.000 euros en los dos últimos años.

En cuanto a la rehabilitada sede de la Cofradía Marraja, cabría hablar más propiamente de reconstrucción del antiguo local social levantado entre 1946 y 1949 como edificio anexo a la iglesia de Santa María, sobre un solar de 180 metros cuadrados propiedad de la Diócesis de Cartagena cedido en usufructo a la Cofradía.

Aunque desde hacía unos años no tiene función como local social, que desempeña otro próximo inaugurado en 2001, sino como almacén de material y escenario de la organización de las procesiones, el valor sentimental para la cofradía del inmueble es muy destacado. En 2006 el edificio presentaba un estado cercano a la ruina, llegando a producirse filtraciones de agua que afectaron a parte del patrimonio en él conservado.

Gracias a los 500.000 euros aportados por la Comunidad Autónoma, la Cofradía emprendió un proceso de rehabilitación en el que se ha construido, sin aumentar la altura total, una planta más, pasando de tres a cuatro. Las obras se iniciaron en 2007 y concluyeron una año más tarde, iniciándose entonces la tarea de equipamiento. En las mismas también ha colaborado la Sociedad Casco Antiguo de Cartagena aportando fondos para la rehabilitación de la fachada.

El nuevo local cuenta con aproximadamente 700 metros cuadrados de superficie y en él se conservan todos los mantos y vestuarios de imágenes, estandartes y trajes bordados de penitentes, así como las instalaciones precisas para la organización de las procesiones, que acceden a la iglesia a través de este local.

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