Con los discursos del Vicealcalde, Agustín Guillén, y el Coronel del Regimiento de Artillería Antiaérea 73, Gabriel Bayarte, se ha celebrado esta mañana el acto de nominación de la calle Adarve de la Artillería, con la que se conocerá a partir de ahora el vial que discurre por la parte superior de la muralla de Carlos III, en el frente del Batel.
Se trataba de una de las actuaciones programadas por el Ayuntamiento y el Regimiento de Artillería para conmemorar el bicentenario del levantamiento del pueblo de Madrid contra el invasor francés en mayo de 1808.
Durante su alocución, Agustín Guillén ha destacado la unión entre el pueblo español y su ejército, algo que en Cartagena se ha vivido de forma clara desde siempre, especialmente con la Artillería, que ya estaba con nosotros tres siglos antes de los sucesos de 1808. El papel de las personas que han trabajado en la defensa de castillos y fortalezas no le es ajeno a un pueblo como el de Cartagena, ubicada dentro de una ciudad amurallada desde los tiempos de los Carthagineses.
Por su parte, el Coronel del Regimiento de Artillería, Gabriel Bayarte, también ha destacado la importancia de la calle que hoy se ha inaugurado, conocida en tiempos como el lienzo del Batel y restaurada hace nueve años por el Ayuntamiento, por ser zona vulnerable y, por lo tanto, prioritaria para su defensa. Allí, los artilleros jugaron un papel muy importante frente a los franceses, las tropas de Isabel II y la sublevación de los cantonales, entre otros hitos históricos.
Con esta denominación el Ayuntamiento ha tratado de recuperar la calificación histórica de Adarve que tuvo el camino que unía los baluartes 21 y 22 de esta fortificación, en los que se situaban una decena de piezas de artillería, dando cuenta al mismo tiempo, de la importancia que este Arma del Ejército Español ha tenido desde hace 500 años en la defensa de la ciudad.
En el transcurso del acto, que ha tenido lugar a los pies del cerro de San José o Despeñaperros, se ha descubierto un monolito en el que figura la placa en bronce con la nueva denominación de la calle, concluyendo con el disparo de unas salvas con los antiguos cañones del siglo XVIII que hay ubicados en estos dos baluartes a cargo de artilleros del regimiento vestidos de época. Después de casi dos siglos las viejas piezas de este frente de la muralla volverán a tronar.