Para muchos será siempre la novia de Mick Jagger, pero Marianne Faithfull (Hampstead, Londres, 1946) es mucho más que eso. Con un pasado intenso y arrollador, la diva de la contracultura estuvo a punto de morir de una sobredosis de heroína, superada su adicción, superado su cáncer de mama, esta cantante se renueva una vez más para presentar su último disco Easy comes, easy go (2008), en la XV edición del festival internacional La Mar de Músicas el jueves 9 de julio en el Patio de Armas del Cuartel de Artillería, a las 23:00 horas.
Además de esa voz oscura y rasposa, esta dama del underground británico tiene un exquisito gusto y una mirada distante e irónica no exenta de cierta tristeza.
Ella, educada en un refinado colegio católico para señoritas, habría inspirado canciones de los Rolling Stones como 'Sister morphine' o 'Wild horses', y vivió la bajada a los infiernos de la heroína, el alcohol y las depresiones. Para más detalles sobre una vida de novela está la autobiografía que publicó en 1994 (en España, Ediciones Celeste). Desde hace unos años, Marianne Faithfull (Hampstead, Londres, 1946) vive en París. Su paso por el cine se puede seguir en películas como 'Hamlet', 'The girl on a motorcycle', 'Maria Antonieta', 'House of Boys' o 'Irina Palm', el largometraje de Sam Garbarski en el que hacía de prostituta luchadora, mientras batallaba en la vida real contra un cáncer de mama. Ya ha dicho, también ella, que le haría muy feliz recibir algún día la llamada de Almodóvar. En los teatros ingleses ha recitado sonetos de Shakespeare con una chelista.
Su último disco 'Easy come, easy go', que Marianne Faithfull va a presentar en La Mar de Músicas, y que hace el número 22 de su carrera, contiene versiones de canciones de diferentes épocas y géneros 'con cierto equilibrio entre pasado y presente- como 'Down from Dover', de Dolly Parton, 'The crane wife', de los Decemberists, 'Sing me back home', de Merle Haggard, o 'Dear God Please Help Me', de Morrissey. Grabadas en compañía de Keith Richards, Nick Cave, Rufus Wainwrigth, Jarvis Cocker, Sean Lennon, Cat Power o Antony Hegarty. El disco, en su edición de lujo 'doble con 18 canciones-, lleva un documental de Anne Rohart con dirección artística de Jean-Baptiste Mondino. Aunque hay otra edición abreviada ''no estoy segura de que todo el mundo quiera escucharme durante tanto tiempo", ha comentado-.
'Easy come, easy go' está producido por Hal Willner, un viejo y asiduo cómplice, que ya había trabajado con ella en 1987 en su disco 'Strange weather'. Se grabó en muy pocas tomas en los estudios más antiguos de Manhattan, y los arreglos de Cohen Bernstein y Weinberg Goldstein se hicieron específicamente para Marianne. Según explica, el título se refiere al dinero. Le interesa mucho la crisis financiera así que asegura estar encantada de haber puesto el dedo en la llaga. Dice que no tener una voz convencional le permite apropiarse de canciones ajenas. Además de esa voz oscura, rasposa, tiene exquisito buen gusto y una mirada distante e irónica no exenta de cierta tristeza.
Se cumplen treinta años de la publicación de 'Broken english', el disco que la devolvió al primer plano. Ahora se la ve como una referencia cultural pero, hasta que se la empezó a valorar, la travesía del desierto fue muy larga para la intérprete de la 'Balada de Lucy Jordan'. A la pregunta de si lamentaba algo ha contestado que, a veces, lamenta su comportamiento cuando estaba drogada o borracha, pero que siente que tiene mucha suerte. En una entrevista concedida hace unos meses al periódico El País decía: "Hay quien vive soñando con ser artista. Yo lo soy".
Pero los encargados de inaugurar la velada son La Banda del Pepo, que inauguran una noche de música de raíz, flamenco, mestizaje y fusión con su disco 'Tanto por hacer'. El grupo murciano actuará a las 20.00 h en la Plaza del Ayuntamiento de manera gratuita. 'Tanto por hacer' ha sido producido por Efrén López -fundador de L´Ham de Foc- y es el segundo disco de La Banda del Pepo, formada por músicos de grupos como Malvariche, Malagüero, L´Ham de Foc o el de Miquel Gil. El espectáculo está asegurado.