La alcaldesa en funciones, Pilar Barreiro, ha mantenido esta mañana un encuentro con el embajador de Bélgica en España, Johan Swinnen, que visita nuestra ciudad con el objetivo de estrechar lazos y ampliar relaciones comerciales, y lo hace acompañado por el cónsul en la Región de Murcia, Juan Pedreño.
Swinnen, que lleva dos años y medio en Madrid al frente de la embajada belga, ha expresado su interés en conocer las distintas comunidades que componen España, en este caso Murcia, destacando en Cartagena la calidad de sus infraestructuras.
A este respecto, el embajador se ha mostrado maravillado con nuestro Puerto, crucial de cara a futuras transacciones, al que ha comparado con el de Amberes, y con la Universidad Politécnica, que considera una perfecta combinación de tradición y modernidad. Actualmente, el Campo de Cartagena acoge varias empresas hortofrutícolas belgas y el interés por instalarse en nuestra zona sigue creciendo.
En cuando a la población belga que vive en nuestra región, a día de hoy rondan los 500, aunque no todos están inscritos en el consulado, por lo que el embajador ha aprovechado para hacer un llamamiento para que formalicen su situación, de cara a mejorar su calidad de vida.
Johan Swinnen no ha querido dejar pasar la ocasión de hablar sobre las consecuencias de la crisis del pepino para la industria agrícola en España, achacando la situación actual a una mala comunicación entre países. El embajador considera que la Unión Europea es importante, estamos a favor de la Unión, pero sería también interesante fomentar relaciones bilaterales concretas, por ejemplo, entre Bélgica y España, países que tienen una complicidad ya histórica.
