La virgen de la Soledad volverá el domingo al Monte Calvario

El sábado 25 de marzo a las 19:30 horas se celebrará una misa con besamanos que contará con la asistencia del alcalde

La Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad del Monte Calvario ha programado para este fin de semana una serie de actividades que culminarán el domingo con la tradicional romería al Calvario, con motivo de la festividad de la Encarnación.

Entre las diversas celebraciones previstas, el sábado 25 de marzo a partir de las 19:30 horas tendrá lugar en la parroquia de Santiago Apóstol de Santa Lucía una solemne eucaristía en la que habrá un besamanos a la Virgen de la Soledad del Monte Calvario y que contará con la asistencia del alcalde de Cartagena, José López.

En este acto se realizará también el nombramiento de cofrades y romeros de honor.

ROMERÍA AL CALVARIO

El domingo 26, a las 10 horas partirá la Romería, que devolverá a Nuestra Señora de la Soledad a su ermita del Monte Calvario. Previamente, a las 9 horas habrá una Eucaristía de despedida, en la Parroquia Santiago, en el barrio de Santa Lucía.

La llegada de la imagen y de los romeros a lo alto del monte está prevista para las 12:30 horas. Allí en la explanada del Santuario se oficiará una Eucaristía de llegada.

Para la atención de los peregrinos, el entorno del Santuario permanecerá abierto desde las 9:00 horas a las 21:00 todos los días. Por otro lado, el templo estará abierto sábados y domingos desde las 9:00 horas a las 13:00 horas.

UNA CITA ANUAL

La romería se hace cada año para celebrar la Festividad de la Encarnación del Hijo de Dios. Dos domingos antes del 25 de marzo, la imagen de la Soledad es bajada a hombros en unas sencillas andas hasta el barrio de Santa Lucía, donde el párroco y fieles le rezan un septenario durante esa semana en la Parroquia de Santiago Apóstol. El viernes se realiza un Vía Crucis por las calles de Santa Lucía y tras estos actos de culto se vuelve a subir el domingo en romería hasta su sede, donde permanece el resto del año.

En la romería se acompaña a la Virgen durante cuatro kilómetros, primero con gran algarabía desde la parroquia de Santiago Apóstol hasta la falda del monte, donde se despiden los tambores y entonces prosigue el cortejo rezando cada una de las Estaciones del Vía Crucis y cantando la Salve. De aquí a la cima se va rememorando la Pasión de Cristo, es un camino estrecho, pedregoso y empinado, que recuerda el verdadero Calvario en Jerusalén (a todos estos ambientes audan también el clima y vegetación de la zona).

Este sitio web utiliza cookies para facilitar y mejorar la navegación. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso. POLITICA DE COOKIES